miércoles, 1 de mayo de 2019

Voladoras

> Por Biciman.©   



Mire que hay formas y formas de atravesar el espacio, multiplicando las ganas por cualquier número diferente a un binario. Dos piernas son menos que cuatro más todas las ruedas que faciliten deslizarse apremiante por superficies no lisas con prisas y con obstáculos. Mire que cansa, que las rutas no pasan se transan, y cada metro negocia un segundo, un minuto más, con la conmovida y elástica voluntad. Mire que las señales enseñan pero la decisión no tiene límites. Tarde o temprano hay que hacerlo bien o mal, la inercia inventa moscas que se van a quedar. El movimiento se demuestra decidiendo lo que no se puede pensar más, hay piso, piernas y ruedas; hay sillas, ventanas y puertas: todo lo cuadrado no es natural. Y hay techos que protegen de lo natural. Pero mire que los techos se caen. Y como el tiempo, el piso siempre está. Arriba o abajo está. Y si está abajo, arriba está el cielo. Y la mirada más alta. Y siempre alta la guardia. Por si las moscas se quedan. Por si las ruedas aprenden a volar.

No hay comentarios: