> Enviado por TintaNegra.
La vida es una puta que te cobra cuando menos lo esperas. Me pierdo en mi memoria de mejores momentos, de una vida con dispersión, sin fondo negro. Hago un brindis por el pasado, hago un salud con el peor de los tragos, por lo mejor que recuerdo hoy. Saludo una forma de vida más sensata, lagrimeo por el peor de los estilos, el opio de mi mente. El presente trae tonalidades que no las puedo adaptar a mi ojo; me creí dotado de poder, me creí insumergible, me creí bonachón y un convencido de que la frase "sí, puedo" tendría buen final. Hay mil formas de estar bien, y mil más una de no estarlo; esa una... es la que no puede erradicarse de los putos sesos, esa maldita y aletargada mente que dibuja un rostro conocido y melancólico, sufriente y lejano, preciso y torcido. La vida es como una puta, te cobra cuando menos lo esperas. ¿Será así? ¿O será que debes violarte a esa puta y salir arrancando sin pagar?
3 comentarios:
este poema es sencillamente genial, no es sólo que tenga un buen estilo propio, es una micro-historia con un fuerte reflejo personal, parece que vamos en decadencia y la puta lo demuestra, pero que más da, puedes disfrutar con ella hasta que te chupa los calzoncillos...entonces es hora de pegarle a la puta.
V.Martínez
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